Ubicada en 21, No. 701 esquina A, Vedado (actual dependencia de la Cámara de Comercio de la Republica) se encuentra la bella y sobria mansión que fuera propiedad y residencia familiar desde finales de los años 20 del Dr. Braulio Sáenz Ricart.

Fue el Dr. Braulio Sáenz Ricart un notable médico, y profesor titular, a partir de 1918, de la Cátedra de Dermatología y Sifilografía de la Escuela de Medicina de la Universidad de La Habana, a la vez que presidente de la Sociedad Cubana de Dermatología al fundarse esta en 1928.

Era hijo el Dr. Braulio Sáenz Ricart de otro prestigioso médico, el Dr. Braulio Sáenz Yáñez y sobrino del General del Ejército Libertador cubano Pedro Sáenz Yáñez.

Una foto de los años 50 en la que se aprecia a la derecha parte de la residencia del Dr. Braulio Sáenz Ricart en la calle 21, No. 701 esquina A
Una foto de los años 50 en la que se aprecia a la derecha parte de la residencia del Dr. Braulio Sáenz Ricart en la calle 21, No. 701 esquina A

La tragedia en el camino de Braulio Sáenz Ricart

Alrededor de 1920 se casó el Dr. Braulio Sáenz Ricart con la joven María de la Caridad Aguilera Sánchez, del tronco familiar de los Sánchez-Batista, hija de María Caridad Sánchez Batista, y sobrina de los hacendados camagüeyanos Bernabé, Pedro y Álvaro Sánchez Batista («Comunidad de Bienes Familia Sánchez») y media hermana del luego senador y rico propietario de fincas arroceras, Guillermo Aguilera Sánchez, cuyo abuelo en común, Antonio Aguilera Caballero, era primo hermano del Mayor General del Ejército Libertador y expresidente de la República en Armas Francisco Vicente Aguilera Tamayo.

El matrimonio tuvo tres hijos: Braulio, Marta y Margarita, quienes con 13, 10 y 8 años, respectivamente, y en compañía de su madre de 37 años, salieron de aquí el 5 de septiembre de 1934 para embarcar desde el puerto de La Habana rumbo a New York a bordo del trasatlántico SS Morro Castle.

Poco antes de la medianoche del 8 de septiembre de 1934, Día de la Patrona de Cuba, se desataba la tragedia del incendio del buque frente a las costas de New Jersey – que luego se comprobara intencional – , y que costara la vida a más de 130 personas, entre ellas, la esposa y los tres hijos del atribulado Dr. Braulio Sáenz Ricart .

En esa hora fatal, un valiente joven guanabacoense de 17 años, Franz D’Beche, campeón cubano de natación en largas distancias, cede su salvavidas a la señorita Rosario Camacho y confía en llegar a nado a la costa o ser rescatado en el agua helada, pero no lo consigue. A bordo también viajaba la cubanita Renée Méndez Capote, que pudo tomar un bote salvavidas.

El Dr. Braulio Sáenz Ricart, aunque se casó nuevamente a mediados de los años 40 con la norteamericana Ruth Miller, llevó un gran dolor para el resto de su vida. La pareja se mudó en los años 50 y rentó la mansión en la que radicaron las oficinas comerciales de «Productos Roche SA», un laboratorio de especialidades farmacéuticas, biológicas y opoterápicas e importadores de alimento para ganado.

Tras el triunfo de la Revolución Cubana el Dr. Braulio Sáenz Ricart abandonó el país, falleciendo en Miami enero de 1961, a los 74 años.