El parque Van Troi que tradicionalmente se ha conocido como parque de la Normal por encontrarse frente a la escuela en la que se formaban los maestros normalistas de La Habana, se encuentra ubicado en el municipio Cerro, delimitado por las calles Manglar, San Joaquín, Amenidad y la cerca perimetral de la antigua fábrica de artículos de higiene y limpieza Sabatés, hoy desactivada.

Parque Van Troi

Recibió el nombre de parque Van Troi a mediados de la década de 1960 en honor del patriota vietnamita Nguyen Van Troi, fusilado en Saigón por las autoridades de Vietnam del Sur tras ser capturado cuando intentaba volar un puente sobre el que se desplazaría el Secretario de Defensa de Estados Unidos, Robert Mc Namara.

En el año 1966 el escultor español Enrique Moret Astruell, profesor de la Academia de San Alejandro creó en el Parque Vantroi un conjunto monumentario en honor del héroe vietnamita:

Se compone el mismo de una escultura figurativa de Nguyen Van Troi en el momento en que era llevado ante el pelotón de fusilamiento. La pieza se encuentra situada sobre una pequeña colina que destaca sobre el relieve del parque hacia el ángulo que forman las calles San Joaquín y Amenidad.

Alrededor de estas se sitúan otras piezas menores dispersas que hacen alusión a los guerrilleros del Frente Nacional de Liberación de Vietnam: una mujer tendida en posición de tiro y varios soldados manejando un cañón antiaéreo.



Originalmente la pequeña colina se iluminaba con un juego de luces que la hacía destacar en la noche y ofrecía al conjunto del parque Van Troi una singular belleza.

Sin embargo, la falta de un mantenimiento adecuado (hoy las luces no funcionan), unido al material poco duradero con el que se realizaron las esculturas y la acción depredadora de algunos han provocado que se pierda buena parte del valor artístico de la obra de Enrique Moret.

Tampoco ayuda el hecho de que el conjunto escultórico no se encuentre identificado. Incluso, muchos habaneros desconocen su existencia y otros lo conocen pero ignoran a quién se encuentra dedicado, su autor o el motivo de su emplazamiento.

Curiosamente, el conjunto dedicado al patriota vietnamita es el único monumento existente en el parque Vantroi, donde tampoco se observan bustos, tarjas o cualquier otro elemento escultórico y conmemorativo; algo bien raro, tomando en consideración que la norma en la ciudad suele ser su profusión.

Sí abundan los árboles: framboyanes, ceibas y jagüeyes que convierten al parque Van Troi del Cerro en uno de los pequeños pulmones verdes de La Habana. Bajo su sombra se encuentran sinuosos senderos que atraviesan el lugar en todas direcciones, una pequeña plaza central concebida como punto de reunión de los antiguos alumnos normalistas y grandes bancos en forma de media luna (únicos de su tipo en la ciudad) construidos en hormigón y granito con espaldares de hierro, ideales para lo conversación en las horas de recreo.

Justo enfrente del Parque Van Troi, en parte de los locales de la antigua formadora de maestros normalistas, se encuentra una escuela primaria que lleva también el nombre del guerrillero vietnamita. Por años, se hizo costumbre que cada 15 de octubre, en el aniversario del fusilamiento del héroe, se proyectara en la escuela la película «Vivir como él» y se realizara un acto protocolar frente al monumento al que asistían los representantes diplomáticos de Vietnam en Cuba.