Existen indicios de que, antes de la conquista de Cuba, en el territorio que corresponde hoy a Batabanó, existía un caserío de indios con el nombre de Matamanó. Así parece haberlo comprobado en sus recorridos de tierra adentro Pánfilo de Narváez y se cuenta que al ser trasladada la villa de San Cristóbal de La Habana hacia la costa norte, algunos vecinos quedaron rezagados, se avecindaron en el lugar y se mezclaron con los indios de la zona.

Alrededor del año 1688, había aumentado el número de vecinos y decidieron fundar un pueblo al que nombraron Batabanó (una corrupción del nombre original del lugar: Matamanó). Poco después se establecería el pueblo de Surgidero.

Sin embargo, el desarrollo efectivo del pueblo de Batabanó no comenzaría hasta casi dos décadas después, en 1715, cuando Doña María de los Ángeles de Barreto donó cuatro caballerías de tierra para poblado y doce para los primeros pobladores.

En el año de 1730, el Marqués de San Felipe y Santiago de Bejucal hizo construir, de su propio bolsillo, un camino sobre la cienaga para enlazar el pueblo de Batabanó con Surgidero, camino que sería mejorado en 1790.

Desde el momento de la fundación de Batabanó se erigió en el pueblo una ermita bajo la advocación de la Divina Pastora que a lo largo de su existencia sufrió diversos percances y fue sometida a varias reconstrucciones hasta llegar al templo actual que data del año 1943.

batabano 1851
Plano de Batabanó y el Surgidero en 1851

La existencia de un camino que, partiendo de La Habana, llegaba hasta la costa sur, atravesando Batabanó y Surgidero, contribuyó al desarrollo de estos pueblos, que vieron aumentar su progreso con la construcción de un ramal de línea férrea que enlazaba Bejucal con el pueblo de Surgidero, el cual pasaba al oeste y a corta distancia del pueblo de Batabanó, que de esta forma quedarían enlazados también con la capital del país.

Surgidero, cuya importancia estratégica no pasaba desapercibida por las autoridades, fue fortificado en el año 1779 y se le colocaron algunas piezas de artillería para ahuyentar a los piratas y corsarios que lo me rodeaban. Estas baterías se abandonarían finalmente cuando los malhechores dejaron de ser un problema y en el espacio que antaño ocuparan se levantaron la oficina de correos, la Aduana y el cuartel de bomberos.

Municipio Batabanó

El 1ro de enero de 1879 (como tantos en la Isla) se creó el Ayuntamiento de Batabanó, con el pueblo del mismo nombre como cabecera municipal y su primer alcalde fue el señor Juan Pérez San Pelayo.

Mapa Militar de Batabanó 1885-1890
Mapa Militar de Batabanó 1885-1890. Cuerpo de E. M. Sección Topográfica de la Capitania General [de Cuba]

Durante la Guerra de Independencia, el territorio de Batabanó se convirtió en campo de batalla entre cubanos y españoles. Cerca de Pozo Redondo libró el Lugarteniente General Antonio Maceo un feroz combate, y en varias ocasiones el General Quintín Banderas intentó tomar Surgidero, sin éxito debido a lo bien guarnecida de la plaza.

En 1898 los ocupantes norteamericanos trasladaron la cabecera para Surgidero y el 24 de enero y el 8 de febrero de 1902, respectivamente le anexaron al municipio los territorios de los desaparecidos ayuntamientos de San Felipe y San Antonio de las Vegas.

Durante la República la superficie del municipio Batabanó alcanzaba los 213 kilómetros cuadrados, con límites al norte con los municipios San Antonio de las Vegas (que había recuperado su Ayuntamiento) y Bejucal, al este con Melena del Sur, al sur con el Golfo de Batabanó y al oeste con Quivicán y La Salud.

Se dividía el municipio en los siguientes barrios: Cabecera Este, Cabecera Oeste (Surgidero de Batabanó), Pueblo Nuevo, Pueblo de Batabanó, Guanabo, San Agustín, Cuatro Caminos, Quintanal, Mayaguanó, Azcárate, San Felipe y Aguacate. Además de los mencionados pueblos de Surgidero y Batabanó, existían otros: San Felipe, Pozo Redondo, Mayaguanó y Quintanal.

Los Ferrocarriles Unidos de La Habana realizaban un recorrido de 15 kilómetros dentro de su territorio, con paradas en San Felipe, Pozo Redondo, Quintanal y Surgidero. Una carretera salía de este último con rumbo a San Antonio de las Vegas, donde entroncaba con la de Managua. Ninguno de los ríos de Batabanó (Guanabo, San Felipe, Santa Gertrudis, San Juan y Pacheco) resultaba navegable.

Pescadores de esponjas en Surgidero de Batabanó

Pescadores de esponjas en Surgidero de Batabanó (1912)

En los terrenos del municipio, llanos y feraces, excentuando el litoral insalubre y cenagoso, se producían caña de azúcar, frutos menores y se criaban aves de corral. Importancia económica tenía también la pesca de esponjas, la fabricación de conservas, el cabotaje, y la elaboración de conservas.

Surgidero, cabecera municipal, era un puerto muy frecuentado por resultar apostadero de vapores y barco a vela que comunicaban la capital del país con toda la costa sur de la Isla y la Isla de Pinos.

Batabanó Después de 1959

Tras la División Político Administrativa de 1976, Batabanó conservó su condición de municipio, integrado a la provincia Habana (Habana campo). Al desaparecer esta entidad subnacional en 2010 pasó a integrar la nueva provincia de Mayabeque.

En comparación con la República su territorio se redujo sensiblemente al pasar de 213 kilómetros cuadrados a sólo 187, con límites al norte con San José de las Lajas, al este con Melena del Sur, al oeste con Quivicán y al sur con el Golfo de Batabanó.