Luis Korda, conocido como Korda el viejo, se llamaba en realidad Luis Peirce Byers, no era familia de Alberto Korda y fue un tremendo fotógrafo cuya obra ha quedado sublimada por la firma común.

Luis Korda nació el 17 de enero de 1912, en Manzanillo -por lo que pese a sus apellidos anglosajones es cubano de pura cepa-, hijo de Edward Peirce, un norteamericano dedicado a la minería y  Virginia Byers, jamaicana asentada en Oriente.

Luis Pierce Byers se transforma en Luis Korda

En algún momento de 1954, que nos ha sido imposible precisar, el manzanillero Luis Pierce Byers se trasladó a La Habana, ya en la capital la primera mención que tenemos es que trabajó en una tintorería sita en la calle San Miguel 105.

Luis Korda

Tal hecho no sería importante si no fuera porque al parecer, y según testimonios de su esposa, en este lugar Luis montó un cuartico oscuro donde revelaba la fotos que hacía en la calle con una cámara de cajón. Estos fueron sus inicios en el arte que lo haría famoso.

Posiblemente en sus correrías de fotógrafo callejero fue donde conoció a Alberto Díaz, quien aún tampoco era Alberto Korda. De la asociación de ambos nacieron los Estudios Korda, que en un inicio estuvieron ubicados en la Lonja del Comercio.

La marca Korda

Para la creación del estudio fotográfico decidieron buscar un nombre que fuese a la vez comercial, artístico, fácil de recordar y pegajoso. Luego de varios descartes, y como homenaje al realizador húngaro -asentado en Inglaterra, quien tampoco sé apellidaba así originalmente y había fallecido recientemente- Alexander Korda, fue que decidieron llamarle de esa manera. 

Tal vez por facilidad comercial, tal vez por puro marketing, ambos decidieron firmar como Korda todas la fotografías del estudio. Tal estrategia, aunque entonces no lo sabían, crearía a la larga confusiones e injusticias, sobre todo para Luis, quien curiosamente -según sostienen varios sitios- parecía estar más dotado técnicamente que Alberto.

Bajo la firma Korda, con la única distinción del nombre, se agrupó todo el trabajo de ambos artistas, encaminado sobre todo al terreno de la publicidad -con Crusellas, Hatuey,  Bacardí-y la moda, donde lograron crear un sello de distinción artística. Aunque también incursionaron en el terreno periodístico, concretamente en el fotoreportaje deportivo, cubriendo eventos automovilísticos.

El aumento en popularidad, más la necesidad de estar presentes en la zona más importante de la moda y la farándula de la capital, motivó el traslado del estudio hacia un edificio ubicado en la calle 21 número 15, entre N y O, frente al hotel Capri, donde radicaron hasta la nacionalización del mismo el 14 de marzo de 1968.

Debe haber sido en el elevador de ese edificio donde Luis Korda conoció a la joven villareña Margarita Sánchez Treto, quien sería su futura esposa desde finales de 1958.

Luis Korda y la fotografía de la revolución cubana

Según su esposa:

A nosotros nos cogió la victoria esperando el año en Brisas del Mar. Al enterarnos de la fuga de Batista, aquello fue muy grande. Recuerdo que la primera instantánea que captó Luis del triunfo fue en la calle, en una esquina de la localidad de Guanabo, a las siete de la mañana, frente al Bar Belix, lugar que aún existe

Esa sería su primera instantánea, que está incluida en un libro publicado en Alemania en 1985, de una serie de fotos que haría esa semana y que lo llevarían a terminar tomando la que tal vez sea la imagen más icónica de la revolución de 1959.

Es la foto que sigue, la cual se convirtió en la imagen del triunfo, pero que andando el tiempo se trastocaría en el dolor de Luis Korda.

Luis Korda

Sucede que luego del 1 de enero la pareja de Estudios Korda, aunque siguieron laborando juntos comenzaron a tomar caminos que los llevaron a tener reconocimientos distintos. Sobre todo a partir de qué Alberto se convirtió en una especie de fotógrafo oficial de Fidel Castro.

La fama que Alberto Korda fue ganando,  que se incrementaría exponencialmente, luego de dar a conocer su gran instantánea del Che Guevara, hizo que periodistas poco informados comenzaran a adjudicarle la imagen que Luis tomó el 8 de enero. Al respecto su esposa ha comentado:

Él me lo decía, y cada vez que veo esa pifia o desconocimiento, trato enseguida de comunicarme con los que la suscriben, porque como el Che dijera en una carta “hay que ceñirse a la verdad como los dedos de la mano a un guante”. Y yo respeto mucho al Che y a la verdad

Muchos han creído que fue Alberto el que tiró esa foto del Comandante en Jefe con su fusil de mira telescópica en el hombro y Camilo con su ametralladora de mano Thompson, calibre 45. Pero en verdad la captó Luis.

Juventud Rebelde.

No sería hasta 1996, once años después de la muerte de Luis Korda, que se realizaría una especie de adjudicación oficial, al incluirse la instantánea en el libro Cien imágenes de la Revolución Cubana (1953-1996).

100 imágenes de la revolución cubana

Luis Korda, después de la nacionalización de Estudios Korda pasó a laborar para el semanario Palante y para la revista Bohemia, donde continuó su romance con la fotografía.

Falleció el 10 de diciembre de 1985, producto de un paro cardiorrespiratorio, su muerte pasó casi desapercibida y fue enterrado rodeado solamente de un pequeño grupo de amigos y familiares.

Luis Korda
Foto tomada por Luis Korda durante una visita del Che a una fábrica de tabaco