El monumento a Don Francisco Frías y Jacott, Conde de Pozos Dulces, se encuentra situado en el parque homónimo del Vedado, en la calle Línea desde 13 y K hasta L.

Fue el Conde de Pozos Dulces el urbanista precursor, junto a sus hermanos, del reparto El Vedado, del que concibieran su parcelación desde 1859 a partir de los extensos terrenos que abarcaba la hacienda «El Vedado» que heredaron de su padre don Antonio Frías y Gutiérrez de Padilla.


Monumento a Francisco Frías "Conde de Pozos Dulces" en el Parque homónimo del Vedado

Monumento a Francisco Frías Jacot, Conde de Pozos Dulces en el parque homónimo del Vedado. La obra fue realizada en 1928 a partir de los bocetos de 1916 del escultor italiano Domenico Boni, pues su muerte acaecida ese año no le permitió concluir el encargo que le solicitara el Ayuntamiento de La Habana.


Francisco Frías «Conde de Pozos Dulces»

Sólo ésto era suficiente para trascender en la historia; pero fue, además, un destacado agrónomo, investigador, publicista, reformador agrario y miembro de las más prestigiosas instituciones científicas de la época.



Gozó el Conde de Pozos Dulces de un enorme prestigio profesional al dar a conocer sus escritos y apreciaciones para el desarrollo agropecuario en Cuba, que se publicaron en forma de cartas suyas por el periódico habanero “Correo de la Tarde” entre 1857 y 1859 y que fueron compiladas y editadas en dos tomos, en Francia en 1860, con el título de “Colección de Escritos sobre Agricultura, Industria, Ciencias y otros Ramos de Interés para la Isla de Cuba”.

A más de 160 años de publicados, todavía conservan vigente claridad.

Hay muy poco escrito por José Martí sobre temas agropecuarios, lo cual no significa que no hayan sido de su estudio y atención, y visionario como era de la República cubana, es muy posible que desde aquí tuviera formado una buena parte del programa agrario.


Libro sobre agricultura del Conde de Pozos Dulces

Fascimil de la obra del Conde de Pozos Dulces «Colección de Escritos sobre agricultura, industria, ciencias y otros ramos de interés para la Isla de Cuba» que tanto interesó a José Martí


Su impresión sobre este tema, nos lo devela una carta que le escribiera a su amigo Francisco Sánchez durante su estancia en Guatemala en 1878:

Guatemala, 23 julio 1878

Amigo mío:

Voy a ser importuno, y a abusar de usted tal vez; pero, aunque me los conozco, no puedo siempre resistir mis tenaces deseos. Este de ahora es uno que tal vez cueste a usted trabajo satisfacer. Si le cuesta, no lo haga. Si no le cuesta mucho, se lo tendré muy en cuenta. Es esto:

Anteanoche me cayó en las manos un libro del Conde de Pozos Dulces «Colección de Estudios sobre Agricultura”, y no pude en toda la noche apartar los ojos de él . Tiene muchas cosas que yo había pensado y otras que no hubiera sido capaz de pensar nunca.

¿Quiere usted prestármelo para mi viaje, a condición de honrada devoluciónen Cuba?

Como estaré aquí hasta el 27, salvo accidente, tendré si usted puede enviármelo tiempo de recibirlo. En cambio, mande como guste a quien lo estima.

Su afmo.

José Martí