El hotel Dos Hermanos fue uno de los dos más importantes que existió en el poblado de Surgidero en Batabanó junto al hotel Cervantes. El Dos Hermanos era un hotel muy singular, hecho por completo de maderas preciosas muy parecido a los negocios de alojamiento del oeste norteamericano.

Comenzó a prestar servicios en 1889. En ese entonces eran sus dueños dos hermanos españoles José María y Joaquín Valdés quienes nombraron el establecimiento en honor a su parentesco.

Hotel Dos Hermanos: Glamour en el Sur

El edificio original sólo tenía dos pisos: la planta baja tenía un café y un salón mientras que el segundo nivel se destinaba al alojamiento. En la década de 1910 se realizaron reformas importantes en el hotel, para aprovechar la demanda del turismo; en ese entonces Isla de Pinos era uno de los destinos preferidos, además del asiento de una importante colonia norteamericana. Se añadieron dos plantas al hotel y se realizaron otras mejoras que brindaron mayor confort. Ese sería el aspecto que conservaría el Dos Hermanos hasta el final de sus días.

 hotel Dos Hermanos
Primer plano del hotel Dos Hermanos. Foto tomada por Rogelio Emiliano Casanova Rodríguez para el grupo de Facebook Fotos de La Habana.

La reforma más importante acometida por los nuevos propietarios – Cinecio y Ciro Moas – quienes, casualmente, eran también hermanos – fue la construcción del roof garden del hotel, en el que se emplearon por los carpinteros y artesanos locales decenas de variedades de maderas preciosas cubanas para completar dos amplios salones, un bar y varias terrazas con balcones.

Entre los huéspedes más distinguidos que se hospedaron en el Dos Hermanos se pueden mencionar a José Martí, Evangelina Cossío, Errol Flynn, los presidentes de la República, Gerardo Machado, Ramón Grau San Martín y Carlos Prío Socarrás. Por sus salones pasó, además, lo más selecto del arte cubano: Benny Moré, Rosa Fornés y Dámaso Pérez Prado, el Trío Matamoros, Rita Montaner.

El hotel llevó a Surgidero la tradición de la paella española, que con el paso de los años se convertiría en el plato típico del pueblo. Tan famosa llegó a ser que todo viajero que pasaba por Surgidero no se marchaba sin antes haber probado la paella marinera del Hotel Dos Hermanos.

Tras el triunfo de la Revolución en 1959 fue nacionalizado por el nuevo gobierno que lo siguió operando como hotel. La falta de mantenimiento e inversión por parte de los nuevos administradores en una edificación cuya estructura era particularmente sensible provocó un gran deterioro en el inmueble. Sin embargo, y a pesar de lo anterior, el Dos Hermanos, sobreviviría a todos los demás hoteles de Surgidero de Batabanó.

Entre 1959 y su cierre definitivo estuvo varias ocasiones sin prestar servicios, entre ellas en 1980, en que recibió una reparación general que lo dejo en condiciones decentes para seguir dando hospedaje. En ese momento era el último hotel de madera superviviente en la antigua Habana, uno de los pocos del país y la joya arquitectónica más importante de Batabanó. Se convirtió en el sitio de descanso para quienes hacían el trayecto desde la Isla de la Juventud hacia la Capital.

En 1989, y tras un siglo exacto de su inauguración, cerró definitivamente. Tras haber comenzado a hundirse a consecuencia del terreno pantanoso sobre el que se había construido y considerarse, sin tener en cuenta su valor histórico, que su rescate sería demasiado costoso. Permaneció en total abandono hasta el año 2006 en que sus ruinas fueron demolidas.

Bar Dos Hermanos

Como curiosidad existe un bar en la Ciudad de La Habana llamado de igual manera, «Dos Hermanos», ubicado hasta la actualidad en la Avenida del Puerto y que mantiene su actividad comercial hasta nuestros días. Este fue conocido durante mucho tiempo sobretodo por el nombre en inglés: «Two Brothers». Pero esa es otra historia que contaremos más adelante.

Imagen del citado bar. tomada por tania diaz marrero para el grupo de facebook fotos de la habana.