La casona de la calle 11, No. 401 esquina G, fue conocida por radicar allí desde principios de los 40 hasta abril de 1959, el prestigioso Colegio Baldor de segunda enseñanza, dirigido por el notable pedagogo Aurelio Baldor de la Vega, quien ya había fundado su Academia Baldor a inicios de los años 30 (en la casona de 23 No. 961 entre 2 y 4, en el Vedado).

Junto con la casa contigua de 11, No. 403, el edificio del Colegio Baldor fue proyectado, presumiblemente, por el arquitecto José Ricardo Martínez Prieto y construidos en la década del 20 para residencias de la familia de Manuel Suárez Cordovés, su esposa Amelia González de Bustamante, y de sus hijos María de los Ángeles, Carmelina, Manuel, Roberto y Gustavo.

Colegio Baldor del Vedado

Manuel Suárez Cordovés fue director y accionista de la «Compañía Eléctrica de Alumbrado y Tracción de Santiago» fundada en 1906, y dedicada al negocio de la electricidad y los tranvías en Santiago de Cuba; Vicepresidente del «Banco Español de la Isla de Cuba»; senador por Pinar del Río entre 1912 y 1920; accionista desde fines de los 20 del «Banco Territorial» de Antonio San Miguel; y heredero de Manuel Suárez Cuétara, su padre, quien fundara en 1873 una próspera e importante compañía almacenista, cosechera y exportadora de tabaco, bajo la razón «Manuel A. Suárez y Co.» , en Amistad No. 95 (actual No. 417) y que luego traslada a la calle Figuras No. 28 (actual No. 182) esquina Tenerife, una construcción que todavía existe (incluso era almacén de tabaco hasta los años 90) y cuyas vegas principales radicaban en sus fincas «Rosario» , en el Valle de Viñales,, la «Mancadera» en Ovas, y la «Estrada» en La Colmena, todas en la provincia de Pinar del Río.

Falleció a inicios de los 40, y sus hijos, quienes ya vivían con sus familias en varias casas de los alrededores, arriendan estos dos inmuebles a Aurelio Baldor, quien también tuvo su propia residencia familiar en los altos de la casa de 11, No. 403.